Repasando los diferentes
marcadores favoritos de nuestro explorador topamos con el de un artista que,
hasta hace dos años, no habíamos tenido ocasión de escuchar y que desde nuestra asistencia a su actuación en directo en
Barcelona lo tenemos como referencia en lo que se refiere a la experimentación
de lo sónico y de lo visual. Nos estamos refiriendo al Norte-Americano Daniel Menche, creador y escultor sónico de ambientes
abrasivos, texturas noise, drones y atmósferas densas que alteran la noción de
la composición musical en sí mismo.
Esta notable experiencia se la
debemos al primer ciclo de “Disonancias” ciclos de música electrónica
comisionado por ROTOR y que tuvo lugar en el “EspaiCultural Caja Madrid” de Barcelona en Octubre de 2010.
La experiencia fue única,
extrema. El ambiente acogedor y sobrecogedor. Un espacio relativamente pequeño,
perfectamente sonorizado, donde el público se disponía sentado en el suelo. La
actuación fue sublime, intensa, abrasiva. Pedales de reverb, delay y distorsión
modulaban sonidos producido por objetos e instrumentos creados por el propio
artista. La realimentación de las diferentes rutas del sonido creaba
atmósferas, bucles y sonidos amplificados donde el noise adquiría otro
significado. Un excelente ejercicio donde el carácter tribal de los
instrumentos generó una experiencia poderosa. Tan poderosa que provocó que
muchos de los asistentes abandonaran el espacio que en ese lapso de tiempo no
era apto para oídos novatos o sentidos cautelosos.
“If music is like blood - then make the speakers bleed" - Daniel Menche
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